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Casa Anamaria, hotel & villas es una espaciosa y suntuosa casa patricia en el corazón de una aldea rural, con su masía secular y sus anexos, rodeada de majestuosos jardines, naturaleza, bosques y campos; aislada de toda vecindad. El complejo hotelero da a los cuatro puntos cardinales y tiene como trasfondo los Pirineos nevados en invierno.
Es un lugar de memoria: la antigua masía Villa Maria, ahora totalmente renovada, fue durante un breve periodo la residencia de Pedro IV El Ceremonioso, Rey de Aragón y Cataluña.
Hace 15 años, un francés enamorado de la provincia de Gerona, Olivier Mitterrand, adquirió lo que era entonces una explotación agrícola de cerca de 70 hectáreas.
Procedió a su renovación completa y encargó la construcción de esta casa de inspiración palladiana, la cual, gracias a la colaboración del arquitecto barcelonés Xavier Gelabert, constituye actualmente el corazón del complejo hotelero.
Casa Anamaria, hotel & villas es en la actualidad un refinado hotel de 4 estrellas que cuenta con 28 habitaciones de gran confort, salones con chimenea y una biblioteca. Cada huésped tiene la sensación de recibir una calurosa acogida, en esta morada de particular encanto y mobiliario refinado.
El hotel está rodeado de dos hectáreas de jardines ordenados, diseñados por el paisajista Martiria Figueras.
Casa Anamaria, hotel & villas constituye un verdadero espacio de bienestar y de serenidad: revitalización, intimidad, descanso, tranquilidad, belleza, gastronomía y enología, acompañados del chef estrella Victor Trochi y la sumiller Ana Vicens (Presidenta de la Asociación Catalana de Sumilleres). El establecimiento propone otros servicios, como Spa, masajes y numerosas actividades culturales y deportivas, en medio de una atmósfera refinada.
El hotel acoge un pequeño número de bodas selectas, así como otro tipo de celebraciones familiares, seminarios y retiros de directivos, gracias a su antigua granja restaurada, que puede contener hasta cincuenta participantes.
Casa Anamaria, hotel & villas está situado en el corazón de la provincia de Gerona, verdadera Toscana catalana, con su paisaje montañoso y verde, sus bosques y campos, sus enérgicas corrientes y sus renombrados viñedos, a 30 minutos de las magníficas playas de la Costa Brava.
La provincia de Gerona, un compendio de historia y de riquezas catalanas, constituye un distinguido destino turístico por su cultura, su gastronomía y su enología; a una hora de Perpiñán y a una hora y media de Barcelona.
